Una bomba solar es un componente de un sistema solar térmico. Mueve el fluido solar y lo transporta al tanque de almacenamiento solar. En sistemas solares térmicos más grandes, las bombas solares también se pueden unir como un grupo de bombas solares para ofrecer una mayor capacidad de bombeo.
Las bombas solares tienen un motor operado eléctricamente que acciona una rueda de paletas, que hace circular el fluido solar, por lo que también se denominan bombas de circulación solar. El motor de la bomba solar está protegido contra la penetración del líquido solar mediante un recipiente y contra el sobrecalentamiento al estar montado en el flujo de retorno más frío del colector solar.
Si la temperatura entre el colector solar y el acumulador de reserva solar cae por debajo de la temperatura especificada, un controlador solar lo enciende. En las bombas solares modernas, el controlador solar también determina el volumen de fluido solar que debe circular y transportarse al tanque de almacenamiento intermedio. Existen bombas solares especiales para preparar el agua de servicio, que evitan la formación de legionella al hacerla circular constantemente dentro del circuito de agua dulce. La electricidad requerida para el funcionamiento es muy baja en comparación con las bombas de circulación estándar y puede generarse mediante un sistema fotovoltaico. El uso de bombas solares está subvencionado por el gobierno.