Por energía primaria se entienden todas las fuentes de energía naturales en su forma original e inalterada. El término energía primaria incluye energías renovables como la solar, la eólica y la hidráulica, la geotérmica, la mareomotriz y la biomasa (materiales animales y vegetales como la madera), y también energía primaria no renovable como el carbón, gas natural, petróleo y uranio.
Si la energía primaria se transforma o procesa, se denomina energía secundaria. Para que la energía primaria pueda utilizarse como energía secundaria, el procesamiento suele conllevar pérdidas de energía. En algunos casos, sin embargo, también se gana energía al procesar la energía primaria, ya que la fuente de energía se vuelve más utilizable. Un ejemplo de ello es el secado de la madera antes de su combustión. Si la energía secundaria se pone a disposición del usuario final para su consumo, por ejemplo en forma de electricidad para el uso de electrodomésticos, se habla de energía útil o final.
Volver a la vista general